miércoles, junio 28, 2006

Se vende la apariencia como identidad





Se vende la apariencia como identidad: María del Carmen Bernal
Por María Lourdes Pallais
México, 24 May (Notimex).- Coco Chanel, la legendaria diseñadora francesa, solía decir que la moda estaba en todas partes, por su relación con las ideas, las costumbres, los acontecimientos.
Y vaya que tenía razón. Hoy, casi un siglo después, el estilo de vestir ha reemplazado la identidad de hombres y mujeres que buscan un "look" a la carta.
Y es que la moda ha dejado de ser un paradigma estético de seguridad personal para convertirse en institución económica que promueve el individualismo narcisista pero niega la identidad real de la persona, en opinión de María del Carmen Bernal.
Además, tiene "tal fuerza que educa o deseduca y se ha convertido en una de las instituciones características de occidente y de la propia modernidad", explica la pedagoga de la Universidad Panamericana en la Ciudad de México, en entrevista con Notimex.
"Algunos de los principales estilos que se están promoviendo a través de la moda, por ejemplo, el crunch, o nuevos héroes, fomentan lo grotesco, lo salvaje y sus acciones y reacciones son en general provocativas", aseguró la especialista.
No es el único. Por ejemplo, en México, un grupo de mujeres y hombres "descarnado y cruel" que ha perdido el "autorespeto", cree que todo lo que hace es "cool" y "hot".
Se viste de manera "grotesca y vulgar" y acompaña su estilo con tatuajes. Sus marcas son Marc Jacobs y Joan Galliano. Sus iconos son el futbolista Denis Rodman y el actor Gael García Bernal.
Hay otro grupo que se autodenomina "singleton" (solos), para quienes, en el caso de las mujeres, "su ideal es la independencia en todos los sentidos"; su icono, Bridget Jones y la serie de televisión "Sexo y la Ciudad", sus marcas: Calvin Klein, Ermenegildo Zegna y Diesel, comentó la educadora.
Su lema es: "si te casas, no más noches por ahí con los amigos o las amigas, no más compras, no más coqueteos, no más sexo, botellas de vino o cigarros. Vas a convertirme en una espantosa máquina dispensadora de leche y un saco que engorda más y más que no le gustará a nadie y que no cabrá en sus pantalones."
Palabras de Bridget Jones, una treinteañera londinense que trabaja en una editorial y ve cómo sus noches pasan solitarias junto a su sofá, su televisor, su bebida, sus cigarrillos y sus kilitos de más, de la novela de Helen Fielding.
"Mientras las mujeres sigan representando en el teatro del mundo lo que no son y no acepten su propia identidad, terminarán por romperse y caer en la desdicha y en vacío", acotó la experta al cierre del Primer Encuentro Internacional sobre la Educación de la Afectividad y la Sexualidad.
Para la experta, los paradigmas de la moda actual, que acentúan la "apariencia física irreal, la adicción por el consumo compulsivo, baja autoestima, insatisfacción y frustración permanentes, conducen a las mujeres a manifestar "un gusto estético, un estilo de vida y ya no una posición de clase".
Muchas mujeres tienen dificultad para diferenciar aquello que sienten e imaginan de los hechos y la realidad del mundo exterior, haciendo del juego, la diversión y del placer un "estilo de vida", acotó la educadora ante 600 profesionales de 15 países que asistieron al Encuentro.
"Mi propuesta es que es importante incidir en que la moda para la mujer debería de ser un estilo de vida que refleje lo que realmente es. Las jóvenes le dan mucho más valor a la apariencia, a la imagen, que a su yo interno. La parte del ser queda desprotegida", agregó.
La especialista expuso su tesis en el encuentro, que se reunió el pasado fin de semana en el Hotel Marquis de la Ciudad de México, con el fin de presentar nuevos estilos educativos de probada eficacia para la sana enseñanza de la sexualidad y la afectividad de los y las adolescentes.
La hipótesis de María del Carmen Bernal está basada en el vínculo que existe entre afectividad y moda, porque ambas "poseen una dimensión expresiva cuyo vehículo de comunicación es el cuerpo", sentencia la especialista.
Hoy en día, "la afectividad tiene un papel relevante, no importa de qué se trate, todo ha de revestirse de un extra inmaterial que revalorice incalculablemente las cosas y las personas elevándolas a la riquísima categoría que inspira un logo, una marca".
"Los cuidados de la belleza tienen que empezar por el corazón y el alma, ya que la estética es el reflejo externo de una honestidad moral, de una autenticidad de sentimientos, si no. los cosméticos no sirven para nada", sentenció la educadora.
Su propuesta busca "lograr que cada una de las acciones humanas sitúe a las personas por encima de sí mismas y no por debajo", promoviendo el "contacto con la naturaleza y las artes, la capacidad de asombro, la imaginación y la memoria" así como "la originalidad y la creatividad para contrarrestar el mimetismo y la uniformidad".
El reto de todo pedagogo es "educar en convicciones, llegar a fondo, apelar a lo intelectual y a la capacidad de elección humana" para desarrollar la autenticidad y la congruencia.

No hay comentarios: